Por Álvaro Astray
La pésima política llevada a cabo
por todos los gobiernos desde hace décadas en el sector minero, ha empujado una
vez más a los trabajadores de este sector hacia la lucha. Pese a estar firmado
el Plan del Carbón, que mantendría –al menos momentáneamente- los puestos de
trabajo en las cuencas mineras, este plan no se está cumpliendo. Debido a este incumplimiento, se está importando carbón
extranjero para quemar en nuestras centrales térmicas, mientras mantienen
parado el carbón nacional en los parques del carbón.
Para contrarrestar esta
situación, los obreros del carbón –famosos por la defensa a ultranza de sus
intereses- ya han organizado diversas protestas, además de volcar el pasado
martes ocho tolvas de carbón extranjero que se transportaban por la línea Asturias-León,
a la altura del pueblo de La Vid. Todo apunta a que vaciar la carga de trenes y camiones de transporte de carbón importación será la nueva estrategia de los mineros.
Ante esta situación, los
patriotas revolucionarios debemos exigir una política de apoyo nacional a
nuestra minería. El Estado debe garantizar el empleo a nuestros mineros frente
al carbón de importación, independientemente de la rentabilidad económica, siendo este concepto de base capitalista,
contrario a los principios comunitarios.
Además, animamos a todos los
patriotas revolucionarios de la zona a sumarse a las protestas de todo tipo que
los mineros de la zona articulen contra el Gobierno y contra las políticas de
recortes, constituyéndose en vanguardia si es necesario. Animamos también al
resto de la población de las cuencas mineras a apoyar a sus vecinos. El
principio de solidaridad, y sobre
todo la solidaridad de clase, frente
al de caridad burguesa es importante
para mantener los derechos obreros, los pocos que aún no nos han arrebatado. Hoy son ellos, mañana puedes ser tú.
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