Por Jean Jaurés
Sabemos que, en la propiedad de mañana y en la sociedad de mañana, concurrirán y funcionarán las cuatro formas esenciales que comienzan a abrirse paso y a aparecer hoy. La primera es el individuo, es decir, el derecho del individuo a desenvolverse en su libertad, sin otro límite que la prohibición de explotar, bajo una u otra forma, la más pequeña parece ajena. Hay otro elemento, que son los sindicatos nacientes, reaccionarios hoy en día, socialistas mañana, pero, en todo caso, células primarias de una organización más colectiva del trabajo. Por encima de estos sindicatos agrícolas u obreros, y de estas agrupaciones profesionales de oficios, está el municipio, que, a pesar de la división del trabajo que se produce entre las diversas partes del territorio, es la primera unidad, más completa y más rica que las agrupaciones profesionales, que no comprenden más que un elemento exclusivo y limitado. Y, finalmente, existe por encima del municipio, la nación, organismo central de unidad y perpetuidad.
Citado por Georges Sorel en Sindicalismo Revolucionario (pág. 82)
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